A Estrada suma la marca Rabiosa a su catálogo de sidras artesanales

La familia de las sidras estradenses sigue creciendo. A marcas ya consolidadas en el mercado como Ribela o Peroja acaba de unirse la etiqueta Rabiosa, que recibe el nombre de una variedad autóctona de manzana de excelente calidad para la producción de sidra. «A Rabiosa é orixinaria de Callobre. É unha mazá branca, pequena e agria. Non é comestible, pero ten algo especial. Para sidra é das mellores porque ten moito zume e consigue facer fermentar a sidra de maneira óptima», explica el empresario Orlando Villamayor.

Villamayor procede de una familia de sidreros de toda la vida. Su abuelo, José María Torres, era originario de Callobre y fue uno de los fundadores de la mítica quesería El Labrador Estradense. Además de los quesos, también le tiraba la horticultura. Por eso emprendió una plantación de manzanos y montó una sidrería. «Recordo que na súa casa había toneladas de mazá», comenta Villamayor. José María murió joven, pero su hija Isaura Torres y su yerno Manuel Villamayor dieron continuidad a la tradición. «O meu pai plantou maceiras en serie tanto en Callobre como en Pardemarín, de onde era el», explica Orlando Villamayor.

Precisamente en la casa familiar de Pardemarín es donde Orlando Villamayor, su hija Patricia Villamayor Neira y su pareja, Manuel Gestoso, acaban de emprender una nueva aventura empresarial. Han habilitado en la casa una sidrería artesanal y han conseguido el sello del Consello Regulador da Agricultura Ecolóxica de Galicia (Craega) para producir sidra ecológica con la fruta procedente de unos de los manzanos más veteranos del municipio.

Apuesta por la Rabiosa

Entre las plantaciones de la parroquia de Callobre y las de Pardemarín, la familia cuenta con cerca de cinco hectáreas de manzanos en producción. Algunos árboles son de la variedad Rabiosa, pero también los hay de Ernestina, Durona, Coloradona, de la Riega, Regona, Raxao o Clara, muchas de ellas variedades procedentes de Asturias que en su día se introdujeron en Galicia. No obstante, la familia quiere hacer una apuesta por la Rabiosa, que es la que da nombre a su sidra, para que no se pierda. «Esa variedade non se pode perder», dice Villamayor.

 

La sidrería de Pardemarín produjo el año pasado, de modo simbólico, unos 3.000 litros. Este año prevé lanzar al mercado unos 12.000 litros entre todos los productos de la marca, que ya cuenta con registro sanitario.

Se producirán, sobre todo, sidra natural y ecológica, pero también se ofertará vinagre de sidra e incluso ginebra, gracias al acuerdo alcanzado con una destilería. El objetivo es cerrar el círculo y abarcar la producción de la manzana, su transformación en sidra y el aprovechamiento integral de los restos de la fruta para vinagre o ginebra. También está previsto comercializar zumo de manzana.

El producto se venderá en pequeñas tiendas de productos ecológicos y a través de la web que la empresa ya tiene en marcha: www.rabiosa.es.

Todos los artículos se comercializan a través de Biostore SL, fundada hace dos años y de la que la joven Patricia Villamayor Neira es administradora única.

Apadrinar un manzano y probar la sidra en el lagar

La familia Villamayor pretende hacer de la sidra el epicentro de un proyecto de desarrollo rural más ambicioso que incluye iniciativas turísticas -como rutas entre manzanos o degustaciones en el lagar- y otras de compromiso -como apadrinar un manzano-. La familia regenta en Callobre la finca A Sobreira, una plantación en la que por 100 euros al año es posible apadrinar un manzano. El padrino recibe una caja de la cosecha anual de sidra, un vaso y una botella de vinagre con el logo de la sidrería y el nombre de su manzano, una camiseta de la marca Rabiosa y un recorrido explicativo con degustación en el lagar.

 

III Andaina da Mazá e da Sidra

Una treintena de personas participaron este sábado en la tercera edición de la Andaina da Mazá e da Sidra, programada por la sidrería de la familia Villamayor. Partiendo del Campus da Mazá e da Sidra -la finca experimental que la familia tiene en Callobre- la comitiva emprendió ruta hacia Cereixo y visitó los molinos de Pardemarín para acabar, tras 10 kilómetros, en los pomares y la sidrería de Rabiosa. Allí hubo degustación de mosto y sidra de manzana.

 

Fuente: La Voz de Galicia (https://www.lavozdegalicia.es/noticia/deza/a-estrada/2020/09/13/estrada-suma-marca-rabiosa-catalogo-sidras-artesanales/0003_202009D13C5995.htm)